Modelo de vivienda
Disponer de un espacio elegido, en el que vivir como cada uno quiere, al propio ritmo, es una cuestión de derechos y básica para todos.
A lo largo de décadas esta no ha sido una realidad para las personas con discapacidad: en muchas ocasiones, la institucionalización y el desarraigo han sido sus alternativas de vida. Desde los recursos públicos y privados no han generado muchas alternativas moviéndose en un esquema rígido.
Amadip.esment lleva años haciendo una clara apuesta porque cada persona viva en el entorno que elija con los apoyos necesarios. En 2005 inicia un servicio, vivienda autónoma, para personas que viven en su casa y que por propia decisión quieren permanecer en ella. Es innovador, al prestar los apoyos en los entornos de vida de cada persona además de introducir una figura, el profesional referente o educador, como vínculo estable para la persona y su familia.
Este servicio ha incrementado el número de personas atendidas hasta contar con el mismo número de personas que vivienda tutelada (servicio que la entidad ya prestaba anteriormente). Su metodología, inspirada en el empleo con apoyo, se basa en que un único profesional es referente de la persona, organizando un sistema de apoyos flexible, sin horarios establecidos y dónde la persona lo requiera.
El crecimiento de vivienda autónoma sirve como aprendizaje a la organización, que quiere implantar un modelo de viviendas común a ambos servicios (tutelada y autónoma) en el que cada persona disponga de un único profesional de apoyo, con disponiblidad 24 h/365 días al año (mediante un sistema de pareja de educadores), personalizado y con alternativas de vida: sólo, compartiendo casa, en grupo… Esta nueva forma de hacer implica orientar a los profesionales hacia una visión compartida de apoyos, trabajo de forma transversal y en red basado en el entorno comunitario.
Respecto a la infraestructura, ha de facilitar la individualización, el bienestar personal y la sensación de estar en casa para cada persona. Por ello, amadip.esment refuerza esa metodología de prestación de apoyos con el diseño de viviendas individuales, dónde se promueve la estética y la funcionalidad.
El modelo ha de responder a un reto importante: las personas envejecen, sufren deterioro a diferentes niveles y su necesidad de apoyo es cambiante. En vivienda autónoma un número considerable de personas ya se encuentran en esa situación y la entidad planifica ofertar esta modalidad a otras en condición similar. Por estos motivos una necesidad futura es contar con profesionales especializados en el ámbito de salud y apoyos tecnológicos que puedan cubrir esta nueva realidad. Evitar cambiar de entorno y promover que la persona mantenga relaciones estables es clave.
Otro reto para amadip.esment y la propia administración pública es garantizar estabilidad económica y apostar seriamente por este modelo de vivienda que presenta mayor flexibilidad y menor coste público al compararlo con servicios como vivienda tutelada.
En conclusión, la entidad está construyendo un modelo de viviendas para todos, centrado en la elección y bienestar de las personas, generando alternativas, infraestructuras individuales dónde un cambio en la vida no implica un cambio de casa. Cada persona una servicio.
Comments (3)
Gran proyecto y muy buen trabajo social !!
Enhorabuena muy bien trabajo....
No es solo un gran proyecto, es una realidad con resultados excelentes