Trabajo con agresores sexuales: la cara menos amable de la discapacidad
Existe una preocupación por el porcentaje de población penitenciaria con discapacidad intelectual que cumple una pena o medida de seguridad por delitos de tipo sexual en los centros penitenciarios españoles.
El programa de atención a agresores sexuales que se desarrolla desde Instituciones Penitenciarias excluye a la población con discapacidad intelectual por tener un CI inferior a la media por lo que esta población no puede acceder a programas de tratamiento.
Por este motivo, Plena Inclusión Madrid y Plena Inclusión Castilla y León, en colaboración con Instituciones Penitenciarias, la UNED y la Asociación Sexualidad y Discapacidad, desarrollamos un proyecto piloto para abordar la educación afectivo sexual y los delitos de tipo sexual con la población de los módulos especiales (MODULO INTEGRA) de personas con discapacidad intelectual de Madrid VII y Segovia.
El proyecto cuenta con una Fase I de educación afectivo sexual con todos los internos del módulo y de obligatoriedad para internos con delitos de agresión sexual. Esta primera fase está compuesta por 10 sesiones de formación más dos sesiones de evaluación. Estas sesiones se realizaron una vez a la semana con una duración de hora y media.
En el caso del C.P Madrid VII, además se seleccionaron dos internos con cumplimiento por delitos de tipo sexual para trabajar de manera individual la tipología del delito y valorar distintas opciones de tratamiento.
Una vez desarrollada la fase I y las sesiones individuales, se elaboró un documento de valoración y propuestas para el desarrollo del proyecto completo.
Fase II. En estos momentos, Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha dado el visto bueno al desarrollo de un Programa de atención a personas con discapacidad intelectual con delitos de tipo sexual.
Fase III: una vez desarrollada la fase II, se haría un seguimiento de las personas una vez hayan cumplido su pena para acompañarles en el proceso de vida en sociedad.